Somos lo que decimos. Es impresionante ver cómo podemos cambiar resultados con solo variar una palabra en nuestra forma de hablar. Hace años que pongo en práctica pequeños trucos de Programación Neurolingüística (PNL) para solucionar situaciones concretas.
Hace poco descubrí un vídeo que me ha cambiado mucho la forma de ver en qué radica el crecimiento personal.
Carol Dweck, la conferenciante que habla en el vídeo, explica sus estudios acerca del poder del todavía enfocado a niños. En definitiva se plantea la mentalidad fija frente a la mentalidad de crecimiento.
La mentalidad fija estanca, nos hace creer que la situación que tenemos ahora es definitiva. Para explicarlo un poco mejor, un ejemplo: "No sé tocar el piano". Si digo esto, mi cerebro se queda con esa sensación, no sé tocar el piano y punto. ¿Y si digo "No sé tocar el piano todavía" ? Algo cambia, ¿verdad? Ahora hay una sensación de potencialidad, de posibilidad de que en un futuro sepa tocar el piano, hay una mentalidad de crecimiento. Veo que, si quiero, si me preparo, si me esfuerzo, algún día podré decir que sé tocar el piano.
Para padres y educadores es una forma muy poderosa de enfocar el desarrollo de niños, se les hace ver que con el esfuerzo pueden conseguir logros que en este momento no tienen a su alcance.
Lo que sabemos o somos ahora no es definitivo, podemos cambiarlo mediante el aprendizaje, mediante la acción.
Carol Dweck dirige sus estudios hacia los niños, y yo me lo aplico también a mí misma, como adulta que desea crecer y mejorar día a día.
Hace un rato si alguien me hubiese preguntado si había escrito mi post de hoy, podría haberle dicho: "no lo he escrito". Una sensación bien distinta a si le hubiese dicho "no lo he escrito todavía". En el segundo caso, hay una afirmación implícita de que lo voy a escribir (es cuestión de tiempo y de ponerme a la acción).
Una sola palabra, todavía, y hemos pasado de la mentalidad fija a la mentalidad de crecimiento. De no ser, a puede ser.
El valor de la potencialidad y el proceso.
Os dejo el vídeo de su conferencia, ella es la más adecuada para explicar qué cambios ha observado en grupos de niños educados en la mentalidad del crecimiento.
Merece la pena darle importancia al poder del todavía, ¿verdad?
Gracias por leerme, comentar y compartir.
Besos,
Sofía.
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